Nasser Al Attiyah dominó en Autos con su Toyota Hilux, más allá de un principio de incendio en el final de la especial, producido por una pérdida de aceite en una válvula.

Se presentaron 317 vehículos en la partida. Si bien la estrategia de los primeros días es no acelerar demás para conservar los vehículos enteros para afrontar las etapas decisivas, Al Attiyah demostró que vino a ganar su tercer Dakar. Que lo consiga o no será cuestión de su talento y de que no se produzcan grandes fallas en su camioneta. La Toyota Hilux es confiable y la marca tiene en el tercer lugar a un experto dakariano, como Nani Roma, y en el equipo a un viejo zorro de los desiertos, Giniel de Villiers, que finalizó la apertura en el quinto puesto, siempre cerca de los punteros.

Más allá del segundo lugar en la etapa de Xavi Pons, con Ford, los grandes rivales de Nasser serán los hombres de Peugeot y de Mini. Hoy, Sainz terminó cuarto, Loeb sexto, Despres octavo y el más ganador, Peterhansel, duodécimo. Son los que corren para el equipo francés.

Entre los de Mini, Al Rajhi fue séptimo, Hirvonen noveno y el argentino Orly Terranova undécimo. Todos a la expectativa de lo que viene, que será mucho más difícil.

Entre las Motos había ganado el francés Xavier De Soultrait pero penalizó a propósito para no abrir camino en la segunda etapa y cayó al décimo puesto. Joan Pedrero quedó como ganador de la etapa 1.

El brasileño Medeiros se impuso en Quads, Kolomy entre los camiones y los divertidos hermanos mellizos holandeses, Tim y Tom Coronel terminaron primero y segundo en la categoría UTV.

Este martes se corre la segunda etapa, entre Resistencia y San Miguel de Tucumán, con una especial en territorio de Santiago del Estero.