La Fórmula 1 visita por segunda semana consecutiva una catedral del auotmovilismo mundial. El Autódromo di Monza será escenario por 62º vez del Gran Premio de Italia. Repasamos la historia del circuito más utilizado por la máxima categoría.

Monza está ubicado en el norte de Italia, a pocos kilómetros al noreste de la ciudad de Milán. Está emplazado dentro del Parco di Monza, y fue utilizado desde el inicio del Campeonato Mundial en 1950. Estuvo presente en todas las temporadas menos en 1980, cuando el Gran Premio de Italia se disputó en Imola.

Inicialmente se disputó el Gran Premio en el un circuito similar al que se utiliza ahora, pero con la curva Parabolica más grande y cuadrada, nombrada Curva di Vedano por aquel entonces. En esas primeras cinco carreras, Juan Manuel Fangio y Alberto Ascari consiguieron dos triunfos cada uno, y Giuseppe Farina el restante cuando se consagró como el primer campeón de la Fórmula 1 en 1950. Después se pasó al antiguo circuito de 10 kilómetros que comprendía las curvas peraltadas al estilo óvalo. Luego ese trazado fue acortado a 5.7 kilómetros sin los curvones peraltados. El Monza original no tenía chicanas como las de hoy en día, sino que era todo a fondo, exceptuando las curvas de Lesmo y la Parabolica.

Fangio logró ganar una vez también en el mítico trazado de 10 kilómetros, pero fue Phil Hill quien lo consiguió en dos ocasiones y es el máximo ganador con ese circuito que fue abandonado justamente en 1961 tras la muerte de Wolfgang von Trips cuando peleaba el título con el mismo Phil Hill.

Desde 1957 hasta 1971 se compitió en Monza sin chicanas. La última competencia fue cuando Peter Gethin lideró el tren de cinco autos que llegaron en 0.6 segundos a la línea de meta. En 1972 se agregaron dos chicanas: la de la recta principal y la de la Variante Ascari. Para 1976 se insertó otra chicana en la recta, dejando una doble chicana al llegar al final de la recta principal. Allí mismo se cambió el sector de la Variante Della Roggia, donde se agregó otra chicana. Para 1995 se hizo más cerrado la Curva Lesmo 2 y en el 2000 se modificó la chicana de la recta principal. El trazado allí cambió de sentido y pasó a ser sólo una curva derecha-izquierda. Así y todo, con tres chicanas y algunas curvas más cerradas que en la década del '70, los tiempos del año 2004 son más veloces que los de cualquier otra época en Monza.

Michael Schumacher posee mayor cantidad de número de victorias en Monza. Ganó en 5 oportunidades, dos más que Fangio, Moss, Peterson, Piquet, Prost y Barrichello. La particularidad es que de los 24 pilotos que hoy corren en Fórmula 1 sólo Alonso, Vettel y Schumacher pudieron vencer en Monza, y todos en más de una ocasión. Vettel y Alonso ganaron sus dos carreras allí con pole incluida, y el asturiano le agregó el récord de vuelta en ambos eventos.

En Monza se dio la carrera completa más rápida de la historia. Fue en 2003, cuando Schumacher ganó con 1h14m19.838s. Lógicamente también se registró la velocidad promedio más alta de una carrera: 247.585 km/h, con paradas en pits incluidas. La vuelta más veloz jamás registrada en una clasificación se dio allí en 2004, cuando Rubens Barrichello marcó la pole a más de 260 km/h de velocidad media.

Aquí está la vuelta:




Tragedias en pista

Monza también está marcado por las tragedias. En 1961, Wolfgang von Trips falleció a causa de un terrible accidente provocado por un toque con Jim Clark en la segunda vuelta. Von Trips peleaba el título con Phil Hill, quien después fuera campeón. Además fallecieron 15 espectadores.





En 1970, la Fórmula 1 se cobraba la vida de su único campeón póstumo. El austriaco Jochen Rindt lideraba cómodamente el campeonato con su Lotus. Pero en los entrenamientos, perdió el control de su vehículo y se estrelló llegando a la Parabolica.





En 1978, una catástrofe llegando a la primera chicana desencadenó la tragedia del sueco Ronnie Peterson. El piloto de Lotus había largado en el medio del pelotón y se vio envuelto en un accidente múltiple antes de terminar la recta principal. El Lotus de Peterson se prendió fuego pero el sueco pudo ser salvado. Fue trasladado a un hospital, donde debido al mal tratamiento recibido, falleció días más tarde.